«Todas las oportunidades marcan el transcurso de nuestra vida, incluso las que dejamos ir.»
El curioso caso de Benjamin Button
No es lo mismo soñar que luchar por un sueño.
No es lo mismo ser, que estar, que existir.
No es lo mismo repetir el mismo día trescientas sesenta y cinco veces y llamarlo un año que batirse el cobre trescientas sesenta y cinco veces por algo que te remueve por dentro.
Mundo dormido, ¿cuántas veces tiene la vida que gritar tu nombre para que despiertes?
No es lo mismo andar camino que escoger un camino y abrirse paso por él, para uno mismo y para los que vengan después. Nada tiene que ver el que se juega todo a una carta en la que cree con el que se hace trampas a sí mismo porque no tiene nada en lo que creer.
No es lo mismo escribir «estoy aquí» desde el sofá de tu casa que recorrer cientos de kilómetros para darle un abrazo a quien necesita que estés. No es lo mismo oír que escuchar, mirar que ver, tocar que sentir. No es lo mismo dejar huella que dejar cicatriz.
¿Eres capaz de darte cuenta?
No es lo mismo tener buenas intenciones que pelear intencionadamente por aquello en lo que has decidido poner tu objetivo. Y da igual lo que sea…sin verdadera determinación, sin un plan, eso nunca será más que un deseo. La diferencia entre una cosa u otra la marcas tú.
Hay una enorme diferencia entre soltar y dejar ir, entre darse cuenta de que algo no es para nosotros y aceptar que no podemos mantenerlo más tiempo a nuestro lado. Entre esas dos cosas, concretamente, suele haber un abismo. Una diferencia abismal que nos mantiene caminando por una cuerda que, cuando se rompe, solo hiere a quien se negaba a soltarla.
No es lo mismo querer mucho que querer bien.
Lo primero lo hacemos casi sin darnos cuenta, lo segundo lo aprendemos con el tiempo.
Supongo que si fuera tan fácil recordarlo yo no estaría escribiendo esto y tú no estarías leyéndolo. Pero es que se nos olvida. Tantas veces se nos olvida que, un día, de repente, te ves mirando atrás y preguntándote cuál de todas esas diferencias fue la que no tuviste en cuenta. Y te preguntas por cuál de todas ellas no cumpliste tu gran sueño, por cuál no abrazaste a un amigo, por cuál no aprovechaste aquellos maravillosos años o por cuál no fuiste un poco más feliz cuando podías.
Sabes, si pudiera cerrar este año con un reflexión al respecto, sería esta:
Es importante diferenciar lo urgente de lo importante. Lo primero no necesariamente será trascendental, pero lo segundo puede cambiarte la vida.
ECGXIII.
Canción: Next to me – Imagine Dragons
No es lo mismo escribir que pintar con las palabras.
Cómo me gusta que hayas vuelto!
Llegas en el momento oportuno. Gracias
Gatsby yo no sé quién eres, antes me preguntaba si eras ella o el, ya no me importa, y es que lo que escribes me llega a el alma. A menudo me paseo por aquí con la esperanza de que tengas nuevo post, no sabes lo feliz que soy cuando te veo dar señales de vida yo no sé si es coincidencia, destino, casualidad o causalidad pero siempre llegas en el momento justo. Algunas veces es como si narraras fragmentos de mi vida, otra llegas a darme una patada en el trasero que me impulsa a seguir el camino. Gracias desde el hipotálamo.
Grande, 🙂 Me quedo con » La diferencia entre una cosa u otra la marcas tú»
Cuanto te echaba de menos 🙂
Acabas de activar un clic en mi cabeza!! Un MILLON de gracias!! Y Feliz Navidad
Nunca dejes de escribir y compartirlo con el resto del mundo
Mil gracias por regalarno este texto ❤️
Una vez más gracias. Amo tus textos como un baño en el mar en pleno agosto. Ojalá fueran más a menudo, los espero impaciente con la misma ilusión que un niño el cinco de enero.
Gracias por tus textos Gatsby, gracias por estos textos que te hacen pensar. Sigue escribiendo porque alegras mi alma 🙂
El mejor regalo de navidades….simplemente gracias
Que lindo escrubis, porfa seguí publicando! Felices fiestas!